domingo, 2 de septiembre de 2018


SEPTIEMBRE 2018. INICIO: Lía y Alejandro forman un matrimonio modelo admirado por muchos. Él es un reconocido empresario bancario y ella una afamada escritora, distinguida entre la sociedad por ser una mujer ejemplar y de buenos principios que forman parte de sus publicaciones. Mónica, su única hija, es una publicista opacada por su propia madre y que mantiene una relación con Juan Carlos Santibáñez, el apuesto hijo de su jefe, dueño de la empresa para que labora y que busca escalar socialmente pues lo avergüenzas sus raíces humildes. En la fiesta de presentación del último libro de Lía, Mónica y Juan Carlos anuncian su boda y a pesar de la dicha Lía nota que su hija no es del todo feliz e intenta hablar con ella pero solo recibe rechazo pues en realidad la muchacha siempre ha estado celosa de su madre, a la que considera demasiado peso para ella pues ha obstruido su carrera debido a que tiene que vivir bajo su sombra. Esto lo desahoga Lía con sus mejores amigas, Paulina y Renata, quienes en el fondo siempre la han envidiado y la aconsejan para que las cosas se le salgan de control, sin embargo Lía sabe que Paulina no aprecia mucho a Mónica porque esta rechazó a su hijo, Sergio, un bueno para nada que se entretiene con todas las chicas que puede, mientras que Renata, divorciada de un marido violento y arruinado, quedó a merced de la herencia de sus padres, la cual cuida desmedidamente temerosa a quedarse en la miseria.

Alejandro y su mejor amigo, Gerardo, saben que Raúl desea hacer negocios con ellos y es el más interesado en que sus hijos se casen. Tienen una entrevista con él y no aceptan sus propuestas. Raúl, furioso, exige a Juan Carlos que haga lo posible por asegurar su futuro. , esposa del hombre, con quien comparte un secreto que los separa desde hace años, lo apoya y contacta a Lía para comenzar con los preparativos de una boda mas la escritora no se hace su cómplice, pues sospecha sus intenciones. Por eso pide a Mónica que recapacite y no se case apresuradamente mas la chica solo la rechaza y luego se desahoga con Nadia, su mejor amiga, a la que revela que se casará sin amor para guardar las apariencias, pues está embarazada del hombre al que sí ama y que la ha despreciado. Nadia aconseja a su amiga que no tenga el hijo que espera pero Mónica no se siente capaz de matar lo que crece dentro de su ser. Llora en silencio en la calle, afuera de casa, y Orlando, el hijo de un antiguo trabajador de su padre, la descubre y escucha su historia. Le aconseja que no lo haga o de lo contrario será infeliz pero ella está decidida. Por eso él le revela todo a Lía, quien llena de angustia se lo dice a Alejandro, quien pide a Mónica que le diga los verdaderos motivos por los que se casará pero esta no hace más que llorar y callar. Se comunica con Sergio, al que hace saber que se casará con Juan Carlos solo por guardar las apariencias, ya que él la ha despreciado. Lía descubre esto al leer los mensajes en el celular de su hija y se lo dice a Alejandro, quien busca a Sergio para partirle la cara cuando este niega su paternidad. Luego enfrenta a su hija, quien reclama a Lía el meterse en su vida y le grita cuanto la odia por opacarla con su fama e impedir que sobresalga por sí sola. Sale de casa y llama a Juan Carlos, al que revela toda la verdad. Al discutir dentro del auto, sufren un aparatoso accidente y al reaccionar ella descubre que él está muerto. Llama por teléfono a Orlando y le pide que la ayude y él acude a recogerla en un lugar clave, lejos del incidente, donde ya se encuentra la policía. Orlando le pregunta a la chica qué es lo que le ha sucedido y ella se lo cuenta, pidiéndole que nunca revele que ella acompañaba a Juan Carlos. De pronto se siente muy mal por lo que el chico la lleva al hospital, donde la internan y horas después le informan que ha perdido el hijo que esperaba. 
La chica se desahoga con Alejandro y culpa a Lía de todo pues por su perfeccionismo no puede ser feliz. La sufrida madre se hunde en una gran tristeza pues recuerda que desde niña Mónica la rechazó. Se desahoga con Renata, la cual le promete que todo estará bien y le cuenta que Paulina está resentida por los golpes de Alejandro a Sergio, quien al enterarse de lo sucedido revela a su madre que Mónica no mintió y el hijo que esperaba era suyo. Paulina, al enterarse del deceso de Juan Carlos, acude a los Santibáñez y cuenta todo a Vanessa, con malas intenciones. Al enterarse, Raúl ata cabos y busca a Lía y Alejandro, ante los cuales acusa a Mónica de ser una zorra y la responsabiliza por la muerte de Juan Carlos. Lía enfrenta al hombre y le asegura tener contactos para desprestigiarlo si se atreve a volver a amenazarlos, jurando saber quién es él en realidad, cómo se hizo de fortuna y cuales son sus verdaderos orígenes, así como que su apellido fue comprado, pues proviene de lo más bajo. Esto enfurece aún más a Raúl, quien se refugia en su mano derecha, Iván, a quien Vanessa desprecia con todas sus fuerzas, y le pide que lo ayude para encontrar la manera de hundir a Lía De la Vega.

Sergio desea recuperar a Mónica pero Paulina y Marcelo, sus padres, intentan hacerle comprender que comete un error y al final el papá decide ser su cómplice para que recupere a la mujer que ama, ocultándoselo a Paulina, quien para hacer las paces pide a Lía que se una a su grupo de damas de beneficencia y Alejandro, al saberlo, la alienta para que acepte y tras hacerlo esta acude a un centro comercial a comprar presentes para los huérfanos de un hospicio. Maneja y se estaciona para acudir a una florería. Al caminar por la calle es casi arrollada por un auto. Es puesta a salvo por Dante, el apuesto desconocido que descubre que la mujer se ha raspado las rodillas. Él vive justo en el edificio ante el cual han quedado tirados. Insiste en curarla y la convence de subir a su departamento, donde le ofrece una taza de té para luego tomar una ducha y con solo una toalla al rededor de su cintura deja al descubierto su sensual torso, el cual pone nerviosa a Lía, la cual ha descubierto demasiado arte en casa del hombre, el cual le dice ser un pintor. Ella agradece el té y la cura. Intenta pagarle por lo que ha hecho por ella pero él rechaza el dinero. Lía se marcha y al llegar a casa le dice a Alejandro lo que sucedió en la calle y temer a que el incidente haya sido a propósito. No se equivoca, pues Raúl está dispuesto a todo para silenciarla.

Sergio busca a Mónica y esta lo rechaza, interviniendo Nadia, la cual defiende a su amiga. El hombre se violenta y está a punto de abofetearla pero Orlando interviene y los dos se golpean cuando Sergio se burla de él pues lo sabe enamorado de Mónica desde que eran unos niños. Luego Orlando se desahoga con Consuelo, la sirvienta que lo ha cuidado desde que quedó huérfano y la cual le aconseja que se olvide de la hija de los patrones o de lo contrario continuará sufriendo. Orlando sin embargo jura que llegará el día en que pueda ser digno de su amor pues gracias a Alejandro cursó estudios universitarios y ahora tiene una maestría, por lo que pide a Gerardo que lo ayude y este lo contrata en la empresa, sorprendiendo a Alejandro cuando se entera. Lo felicita y le augura un gran futuro.

Renata descubre que Paulina se ha hecho gran amiga de Vanessa y le reprocha el acercarse a ella cuando Raúl ha amenazado a Lía. Paulina pide a su amiga que no intervenga en sus asuntos pues en realidad desea desprestigiar a Lía ante la sociedad debido a la envidia que siempre le ha tenido. Esto lo descubre Marcelo, el cual no está dispuesto a permitir que traicione una amistad de años. 
No sospechan que Renata ha alertado a Lía, quien por accidente vuelve a encontrarse con Dante, quien le dice ser fanático de su obra y la invita a su departamento para discutir uno de sus libros, hallando la mujer al desconocido como un hombre sumamente interesante. Este no resiste más y la besa por lo que ella, llena de miedo, sale huyendo del lugar y al llegar a casa descubre que la perdido su celular. Marca y se asombra cuando Dante le contesta y le dice que lo ha olvidado en su departamento. La mujer sale de inmediato al lugar sin percatarse de que Consuelo la ha escuchado. Al llegar al departamento de Dante, este la recibe casi desnudo y la besa apasionadamente por lo que ella le corresponde y se entrega a él. Le pide que lo lleve a la feria del libro que se presentará en Cozumel y ella se las ingenia para pedir a Alejandro que la deje ir sola. Por ello Mónica asegura a su padre que, para la escritora, su renombre es más importante que ellos, y que esa es la razón por la que ha decidido ir sola. Alejandro entonces discute con Lía, quien dice estar cansada de reclamos y reproches y enfrenta a su hija, a la que hace saber que ella no es la responsable de lo que le sucedió ni de que haya tomado decisiones incorrectas. Luego habla con Consuelo, quien le dice saber de su relación extra marital y le pide que luche con todas sus fuerzas para salvar a su familia. La asustada Lía informa de esto a Dante.

Orlando sufre por el amor que siente hacia Mónica y se lo hace saber a Gerardo, quien le deja claro que ninguna mujer debe ser imposible para él, que ha salido adelante por sus propios méritos. Le aconseja que deje de trabajar como empleado en casa de los Baena solo por agradecimiento, pues merece superarse. Orlando le pide una oportunidad en el banco.

Vanessa trata con desprecio a Iván, quien a su vez hace saber a Raúl que Lía viajará a Cozumel para un encuentro de escritores por lo que el empresario le ordena que le de un susto que nunca olvide. Iván sale de inmediato hacia el caribe, donde Lía da una conferencia para luego dirigirse a su hotel, donde bajo una máscara Iván la persigue con un arma, dejándola escapar. Ella se topa con Dante, quien ha llegado y la abraza mas ella teme a que haya sido él quien le dio el susto. Le exige que le diga qué es lo que quiere y él asegura que solo busca estar con ella. Lía le cuenta lo que vivió y cuales son sus sospechas por lo que Dante le aconseja que ponga una denuncia contra Raúl Santibáñez pero a la mujer se le ocurre algo mejor. Llama a su gran amigo, Esteban Solórzano, periodista con grandes contactos, al que pide que la ayude a investigar a fondo a Raúl, pues desea escribir un libro sobre él. Luego pasa tiempo con Dante, al que se entrega en cuerpo y alma, a pesar de sentir culpa por la traición a Alejandro, al que Gerardo aconseja que alcance a su esposa en el caribe y se reconcilie con ella. El hombre lo hace y está a punto de sorprenderla con Dante pero el destino lo impide, aunque la nota demasiado nerviosa. Dante, que los mira a lo lejos, decide regresar a la ciudad y el matrimonio pasa unos días juntos, en la playa, dándose cuenta Alejandro de que algo le sucede a su mujer, quien no deja el móvil un solo momento y la cual parece distante y lo rechaza cuando intenta hacerle el amor. Escuchan ruidos en la casa y Alejandro acude a verificar qué sucede, seguro de que alguien ha penetrado en su propiedad. No se equivoca pues Consuelo ha descubierto al malhechor, quien la tiene sujetada y con la boca cubierta para evitar que grite. Cuando la mujer entra en pánico, y lo muerde para gritar, él lo evita al cortarle el cuello con un cuchillo de la propia cocina. Huye, pero no ha dejado un solo rastro de su presencia. 
El suceso llena de horror a Lía, quien sospecha que quizás pudo haber sido Dante, al que muestra miedo cuando este la sigue ante su negativa para verlo. La sorprende y le asegura que él es incapaz de matar a nadie. Penetra en el restaurante del hotel en que ella se ha visto con Paulina y Renata, quienes la notan extraña. Ordenan y Lía se disculpa para ir al tocador. Se encuentra con Dante en el elevador y allí hacen el amor.

Alejandro hace saber a Mónica que Orlando está enamorado de ella y por eso busca superarse a toda costa mas él no sabe si podría aceptar que su hija le correspondiera al hijo de un antiguo empleado. La muchacha habla con Orlando y le dice que nunca corresponderá a su amor, por lo que le da otra oportunidad a Sergio, con quien comienza un noviazgo formal sin sospechar que este tiene amoríos con Nadia, la cual se llena de rabia al enterarse e intenta a toda costa convencer a su amiga de que no regrese con quien solo se burló de ella pero Mónica no hace caso por lo que la amiga comienza a intrigar ante Lia, la cual no está de acuerdo con las decisiones de su hija, a la que se enfrenta, recibiendo a cambio solo ofensas que la hacen abofetearla y confesar lo harta que está de su rechazo y acusaciones.

Esteban ha indagado sobre Raúl, descubriendo que por años se ha dedicado a negocios ilícitos, así como al lavado de dinero. Alguien de su grupo de periodistas da el informe al millonario, quien ordena a Iván que de un susto al periodista, el cual ha mandado por e-mail toda la información a Lía. Esteban recibe amenazas de muerte pero no teme y jura que ahora la investigación se ha vuelto personal y no descansará hasta desenmascarar a Raúl. Al llegar a casa sorprende a Diana, su esposa, demasiado perturbada por la muerte de su perro, el cual ha sido brutalmente asesinado.

Lía y Dante se dejan llevar por la pasión y su romance rebasa los límites, al grado que ella se vale de todo para verse con él, confesando a sus amigas sentir que la llama del amor entre ella y Alejandro se está apagando, a la par que organiza una fiesta de cumpleaños para Renata, en la que alienta a Gerardo para que se acerque a la mujer pues ambos están solos y tienen demasiado en común. Esto hace que los solitarios comiencen a frecuentarse pero el auto estima de Renata la hace rechazarlo pues teme a que jueguen con ella.

Marcelo descubre que está en la ruina y Paulina se niega rotundamente a aceptarlo pues no desea ser la burla de la gente. Maldice a su marido, el cual es apoyado por Sergio, quien jura que cuando se case con Mónica las cosas cambiarán. Pero estos e ve lejano para el muchacho cuando Orlando lo descubre revolcándose con Nadia en un auto y a ambos los acusa de traidores. La amiga le pide que no diga nada a Mónica si no desea lastimarla.

Raúl insiste en responsabilizar a Mónica por la muerte de su hijo y cuando se comprueba que ella acompañaba al occiso al momento de su muerte, es detenida. Raúl asegura a Alejandro y Lía que hará que recaiga sobre su hija todo el peso de la ley. Lía lo enfrenta y le dice tener pruebas que lo acusan de ser un criminal por lo que no dudará en darlas a conocer, así como estar segura de que él envió a alguien para que la atropellara en la calle. Raúl asegura no saber de que le habla ni temerle. Ordena a Iván que la ejecute y haga que todo parezca un suicidio. Este, junto con otros, comienza a acechar a Lía, quien se da cuenta al ir manejando y al intentar huir se introduce en un bosque, donde su auto choca con un árbol. Desciende y corre a esconderse, llena de miedo. 
Es acechada y perseguida durante la noche, siendo atrapada por uno de los maleantes luego de que ella intenta llamar por teléfono alguien. El móvil cae al suelo y Dante, al contestar, escucha cuando la toman para atarla y llevársela. Rastrea la llamada y sale de inmediato a buscarla pero al llegar no encuentra nada. Sin embargo Iván no tiene planes de matarla todavía y decide sacar ventaja de todo por lo que la mantiene secuestrada y se comunica con Alejandro para exigirle un millón de dólares a cambio de la libertad de su esposa. Alejandro decide dárselos y habla con Esteban, el cual sospecha que Raúl Santibáñez se encuentra detrás de todo y pide al agente Julio Camargo que ayude a su amiga, revelándole estar seguro de que Consuelo murió en un intento de asesinato a Lía, así como estar convencido de que Raúl Santibáñez se encuentra detrás de todo. El agente visita al empresario, quien lo echa y le exige que no se meta con él ni lo acuse de las desgracias de sus enemigos. Luego habla con sus contactos para pedirles que hagan que caiga sobre Mónica todo el peso de la ley pero esta es defendida por Gerardo, quien le promete que quedará en libertad. Orlando no se separa un solo momento de la muchacha, quien se pregunta por Sergio, el cual se encama con Nadia y es descubierto por Paulina, quien lo abofetea y acusa de no pensar en su familia pues necesitan del dinero de Alejandro para no perder su estilo de vida, mientras que a la muchacha la saca de los cabellos de su casa y le exige que no vuelva a poner un pie en ella.

Alejandro reúne el dinero que Iván le ha exigido y acude con Julio y agentes de la AFI a rodear el lugar, donde finalmente nunca aparece nadie pues Lía ha logrado desatarse y huir del lugar donde la tienen. Es perseguida por los malhechores, quienes huyen cuando ella, al cruzar la carretera es arrollada por un auto. Creen que está muerta pero no es así. La han enviado al hospital, donde es resguardada mientras que Raúl, lleno de rabia por la ineptitud de su trabajador, lo reprende. Iván se revela por lo que sin más Raúl le dispara en la cabeza, asesinándolo, y días después reporta su desaparición, fingiendo estar preocupado. Este caso lo toma Julio, quien pide a su compañero, Mario, que lo ayude y así ambos lleguen hasta las últimas consecuencias pues el agente está convencido de que Raúl miente y tiene una muy buena coartada para haber reportado la desaparición.

Ante la desaparición de Lía, Dante prepara sus cosas para marcharse. Se asombra cuando recibe un mensaje en el móvil y sale de inmediato al hospital, donde se hace pasar por enfermero para estar cerca de la mujer. Luego ofrece sus servicios a Alejandro para cuidar de ella durante su recuperación, penetrando así en la casa de la familia, donde conoce a Mónica, quien queda libre tras pagarse una fianza luego de revelar los acontecimientos de la noche en que Juan Carlos murió. La joven mujer siente una fuerte atracción hacia Dante, la cual hace que comience a rechazar a Sergio, al que reclama el haberla dejado sola cuando más lo necesitaba. Aparece Orlando y acorrala al hombre para que le diga a Mónica las razones pero este no se atreve. Ella pide Orlando que le diga qué sucede pero este tampoco se lo dice. La situación se tensa más ante la presencia de Nadia, a quien luego Mónica le pide que le diga qué es lo que le ocultan. Esta le dice que Sergio tiene a otra mas no dice que es ella.

Lía revela a Julio, Mario y Esteban lo que le sucedió y el periodista publica en su columna todas las sospechas que conducen a Raúl Santibáñez, quien lo demanda por difamación y discute con Vanessa, a la que se atreve a golpear cuando esta le dice estar cansada de él, segura de que su cómplice es Iván, su hijo bastardo. La mujer se horroriza cuando el hombre le dice que ya no tiene que preocuparse más por su hijo natural, pues está muerto. Vanessa se llena de horror pues sabe que el hombre fue capaz de matar a su propio hijo.

Paulina aconseja a Renata que se de la oportunidad de amar a Gerardo pues quizás la vida no le brinde otra oportunidad. Acuden a visitar a Lía y en casa de esta Renata reconoce a Dante, pues es el hombre con el que una vez se cruzó en el restaurant del hotel. Él finge no saber de qué le habla. Las mujeres se horrorizan cuando Lía les dice que Raúl Santibáñez quiere matarla porque tiene información sobre su pasado y crimenes. No cuenta con que Paulina se comunica inmediatamente con Vanessa para decírselo, llevándose una gran sorpresa cuando la mujer se presenta ante Lía para decirle que ella la ayudará a hundir a su marido.

Mónica coquetea con Dante y esto despierta los celos de Orlando, a quien ella pide que la olvide pues jamás le corresponderá como él desea ya que solo puede quererlo como hermano. Luego esto es descubierto también por Sergio, quien arma una escena de celos a la muchacha cuando la sigue y la descubre con el apuesto hombre, a las puertas de su departamento, y le arma un safarrancho que provoca que Dante lo golpee para luego rechazar a la chica, quien discute con su novio y da por terminada su relación. Él se niega y la acusa de estarse revolcando con el enfermero de su madre. Mónica lo abofetea y acude a desahogarse con Nadia, quien la felicita por haber roto su relación y la alienta para que conquiste a Dante, el cual no deja de pensar en Lía, a la que incomoda con su presencia pues ella teme a que su familia se entere de su idilio amoroso pero el joven amante se las ingenia para hacerla suya en todo momento.

Julio y Mario se entrevistan con Raúl, al que no dan razón del paradero de Iván. Los agentes se intrigan cuando se dan cuenta de que Vanessa quiere decirles algo pero la mujer calla ante la presencia de su marido. Luego la busan por separado pero ella, temerosa por su vida, oculta lo que sabe.

Alejandro intenta acercarse a Lía pero esta lo rechaza y al recuperarse comienza a frecuentar cada vez más a Dante, pasando en casa el menor tiempo posible. El esposo habla con Gerardo, el cual está del lado de la mujer, quien al besar a Dante en público es vista por Renata, quien los sigue hasta el departamento de él, donde hacen el amor. Renata aguarda hasta ver salir a su amiga del lugar. Le cuenta esto a Gerardo y son escuchados por Alejandro, el cual decide contratar los servicios de Humberto Garnica, un investigador privado que comienza a vigilar a Lía, la cual pasa tiempo con sus amigas y Esteban, con el cual planea desenmascarar a Raúl Santibáñez. Pero pronto Humberto se da cuenta de que la mujer sabe cuidarse muy bien las espaldas y sale de casa por una puerta trasera para abordar un taxi, el cual sigue hasta el departamento de Dante, donde los amantes hacen el amor. El detective se las ingenia y luego de días, acechándolos, logra fotografiarlos.

OCTUBRE 2018. Sergio intenta hacer suya a Mónica, por la fuerza, y ella lo golpea para escapar. En casa es consolada por Nadia, a la que Orlando enfrenta y le pide que diga a Mónica las verdaderas razones por las que siempre se ha opuesto a su relación con Sergio. La amiga se marcha y orlando aconseja a su amada que la siga para que ella misma lo descubra. La lleva hasta el departamento de Nadia, donde ven entrar a Sergio. Mónica se desilusiona al verlos besarse y más aún cuando Orlando le dice que esos dos le han visto la cara desde hace tiempo. Los enfrenta y les exige que no se vuelvan a acercar a ella.

Lia se aterra cuando Alejandro le pregunta si hay otro hombre en su vida y si lo ha dejado de amar. Intenta cambiar la conversación pero el marido insiste y le exige que le diga si hay otro en su vida pues la nota rara desde hace tiempo. Debido a esto la mujer decide darse un tiempo con Dante, quien casi enloquece pues ella no le contesta las llamadas ni los mensajes, decidida a olvidarse de él. Dante luego se encuentra con Mónica, quien lo abraza y llora al contarle la situación sentimental por la que atraviesa, así como estar cansada de que todo le salga mal. Lo besa en un arranque y él le corresponde mas luego le pide que no vuelva a hacerlo pues él está enamorado de otra mujer.

Julio y Mario encuentran parte de los restos calcinados de Iván. Los manda a laboratorio y descubre quien es la víctima. Busca a Raúl para darle la noticia de lo que sucede y este llora. Revela que la víctima fue su hijo y acusa tanto a Lía como Esteban de ese crimen, asegurando que estos desean destruirlo. Julio busca a la escritora y el periodista, quienes se asombran ante el nuevo descubrimiento y al ver una foto de Iván Lía lo reconoce pero calla ante el policía para luego decirle a su amigo estar convencida de que Raúl se encuentra detrás de su secuestro y pudo haber asesinado a su propio hijo al saber que este no la mató.

Raúl busca a Omar, un hombre de su confianza, al que promete mucho dinero a cambio de serle incondicional.

Sergio descubre que está enfermo de VIH y culpa a Nadia de haberlo contagiado. La muchacha se aterra ante la noticia y teme a hacerse la prueba por temor a estar contagiada mientras que él se hunde en una terrible depresión que lo conduce al suicidio. Este horrible acto separa todavía más a Paulina y Marcelo, quien luego del entierro de su hijo pide el divorcio a la mujer. Esta recapacita sobre las burlas a Renata por ser una divorciada y la envidia que siempre ha sentido hacia Lía, por lo que las busca para pedirles perdón, así como ayuda. Lía habla con Marcelo, el cual revela que su vida al lado de Paulina siempre fue un infierno y se sentía atado a ella solo por su hijo. La mujer calla cuando el hombre le pregunta de qué sería capaz ella por Mónica.

Diana es acechada por Omar, quien la asusta y le jura que Esteban no deja de entrometerse en asuntos que no le atañen, pronto uno de los dos morirá. Asustada, la mujer pide a su marido que desista de investigar a Raúl Santibáñez pero este se niega y hace saber todo a Julio, quien le dice estar convencido de que Raúl asesinó a Iván para silenciarlo

Renata decide darle una oportunidad a Gerardo, quien la besa apasionadamente, haciéndola sentir viva nuevamente. Luego hablan de lo que saben de Lía y Gerardo le dice que es mejor que olviden el tema pues finalmente Alejandro no cree a su esposa capaz de engañarlo.

En el estacionamiento de un centro comercial, Lia es sorprendida por Dante, quien le pide que hablen. Entra en el auto de la mujer, quien mientras conduce le pide que se olvide de ella pues su marido ha comenzado a sospechar. Dante sin embargo no está dispuesto a perderla y la besa apasionadamente. Ambos entran a un motel, donde hacen el amor ardientemente. Él le asegura que si son cuidadosos nadie los descubrirá.

Nadia se siente terrible y habla con Mónica, a quien pide perdón y revela los verdaderos motivos por los que Sergio se suicidó. Mónica lleva a su amiga a hacerse una prueba de VIH y Nadia llora, estremecida, pues tiene miedo a morir. Al paso de unos días acude a por los resultados y se alegra al saber que está limpia. Se lo hace saber a Mónica, quien acepta que vuelvan a ser amigas y hace una visita a Dante, sin sospechar que con este se encuentra su madre, Lía. Por esta razón Dante le impide que entre a su departamento.

Alejandro y Raúl se enfrentan en una convención pues el segundo acusa a los Baena de ser una familia de asesinos. Los hombres de Raúl muestran sus armas de fuego cuando Alejandro se abalanza contra él para golpearlo. A Alejandro no le queda más que retirarse no sin antes decir que su enemigo se ha empeñado en acusarlos para así desviar la atención de los medios, pues es él el que oculta muchas cosas. Aparece Esteban para decir que eso es verdad y delante de todos pregunta a Raúl por qué siempre ocultó que su hombre de confianza, Iván, el cual está desaparecido, en realidad es su hijo bastardo. El empresario es acorralado por periodistas y reporteros y se marcha en medio de un zafarrancho. Al llegar a casa maltrata a Vanessa y le exige, con cachetadas, que le diga con quién ha hablado y lo ha traicionado. Ella llora y jura que con nadie, así como hace saber a su marido que no se puede tapar el sol con un dedo ni sus secretos estarán ocultos por siempre. El hombre la amenaza de muerte y ella se las ingenia para hacer sus maletas y abandonarlo. Cuando Raúl se da cuenta, la maldice y jura que la encontrará y la hará arrepentirse de todo.

Orlando sospecha que Mónica tiene amoríos con alguien y se lo reprocha. Ella le pide que no se le vuelva a acercar y los escucha Lía, la cual dice a su hija que el muchacho vale la pena pues ha demostrado ser capaz de salir adelante y no tener vicios como los demás. Furiosa, Mónica pide a su madre que no se meta en sus asuntos. Lía le pide que le diga por qué siempre la rechaza y no pueden ser amigas. Mónica insiste en que no puede apartarse de la sombra de su mentora mas Lía cree que es algo más. Finalmente Mónica revela que siempre ha vivido con el temor de no poder ser igual a ella, no alcanzar su fama ni éxito, ni ser una mujer perfecta a la que todos admiran. Lía la abraza y le hace saber que no tiene por qué intentar igualarla, pues finalmente cada una camina por rumbos distintos.

Julio y Mario sufren un atentado en el que el segundo es herido de gravedad. Sospechan que ha sido Raúl quien ha intentado silenciarlos y deciden no darse por vencidos. Sin embargo la suerte no está de su lado pues Omar penetra en el hospital y asesina a Mario, causando esto un gran golpe para Julio, a quien Esteban aconseja que no se de por vencido ni se deje asustar, pues Raúl está actuando así por miedo. 
No sospechan que este tiene un plan siniestro para vengarse de Alejandro y Lía y ha enviado a Omar para que asesine a Mónica y así estos sepan el dolor que a él le causó perder a su hijo. Omar acecha a la muchacha, quien se encuentra con Nadia y curiosamente las dos van vestidas igual. El malhechor las confunde y a lo lejos dispara, matando a Nadia para luego darse a la fuga. De inmediato se desplaza toda una búsqueda policíaca pero no hay rastros de quién haya sido el asesino ni se saben los motivos por los que la muchacha haya sido asesinada. Al enterarse, Lia se aterra pues está convencida de que era Mónica a quien querían matar y hace saber a Julio que sospecha de Raúl Santibáñez. Alejandro respalda la acusación de su mujer al revelar lo que pasó en la convención en que lo desenmascaró por la paternidad de Iván.

Dante recibe una llamada que lo estremece. Al colgar se siente confundido y lleno de dolor azota los puños contra una mesa. Sale a caminar y se encuentra con Mónica, la cual le dice lo que sucedió y se aferra a él. El hombre la abraza muy fuerte y ella le da un beso apasionado.

Alejandro se lleva una terrible sorpresa cuando Humberto le entrega fotos de su mujer en los brazos de un hombre más joven. El dolido esposo llora lleno de rabia y decide ir en busca del amante de su mujer pero nadie responde a la puerta. Sale del edificio y a lo lejos ve a Lía penetrando en el lugar. Sin embargo al no encontrar a Dante la mujer sale y decide dar un paseo. Se lleva una terrible sorpresa cuando lo ve besándose con Mónica, la cual luce feliz en sus brazos. Afectada, regresa a casa y toma una ducha y luego hace saber a Alejandro que ha descubierto que su hija y el enfermero tienen una relación. Esto hace que el marido enfurezca aún más pues ese hombre le ha arrebatado a su esposa e hija, burlándose de todos. Enfrenta a Mónica, la cual defiende el amor que siente por Dante, al que Alejandro busca para confrontarlo. Cínico, Dante asegura amar a las dos mujeres y estar dispuesto a quedarse con ambas. Alejandro lo sujeta con fuerza de la cabeza y lo azota contra una pared, lleno de rabia. Al darse cuenta de que lo mató, invadido por la desesperación, se controla y limpia sus huellas digitales de todo lo que tocó. Justo cuando está a punto de irse, el teléfono de Dante suena. Es Lía, quien se dirige al departamento del hombre y al entrar descubre lo que ha sucedido y se aterra al ver a Alejandro con las manos llenas de sangre. Él le dice que todo ha sido un accidente y que solo había ido a reclamar a Dante el haber jugado con su esposa y con su hija. Pide a la mujer que se marche pues él se encargará de todo. Lía se va y entonces Alejandro, enloquecido, riega licor cerca del cuerpo de Dante y se encarga de hacer parecer que el hombre resbaló. Toma su teléfono y de inmediato los mensajes de texto y llamadas de su esposa y de su hija, así como su número de los contactos del occiso, y se marcha percatándose de que nadie lo haya visto, prendiendo fuego al lugar y llamando a emergencias desde una cabina, en la calle. Por su parte, en casa, Lía se siente terriblemente por lo que acaba de suceder y se desmorona cuando aparece Mónica para decirle que está enamorada de Dante y se casará con él. La madre no muestra una sola emoción y toma un baño, llorando desgarradoramente. Al salir busca entre las cosas de su marido, descubriendo así las fotografías que a este le entregó Garnica. Se aterra pues cree que Alejandro pudo asesinar a Dante intencionalmente. Cuando este llega a casa, la abraza y le jura que todo fue un accidente pero ella no le cree y lo abofetea. Discuten y el le reprocha su infidelidad. 


Confundida por la muerte de su amante, Lía le pide a Alejandro el divorcio a cambio de no denunciarlo pero él no lo acepta y le hace comprender que su carrera, la de él, e incluso la de Mónica se verán afectadas si se llega a saber todo.

Julio aparece en casa de los Baena y les dice que Dante murió en un incendio provocado accidentalmente por él mismo y que se ha descubierto que no era ningún enfermero. Lo escucha Mónica, quien se niega a aceptar la noticia y está convencida de que también a él lo mataron para perjudicarla a ella. Culpa a Lía de todo y esta vez Alejandro interviene y la sacude para decirle que su madre no tiene la culpa de nada. Se sorprenden todavía más cuando Julio les hace saber que el cuerpo del hombre fue reconocido por su esposa, quien tenía meses buscándolo pues les abandonó a ella y sus dos hijos. Se marcha y las dos mujeres sufren por separado, pues fueron engañadas por el apuesto amante. Por su parte, Alejandro se siente terrible por lo que hizo y se refugia en el alcohol, confesando a Gerardo que ha hecho algo terrible pero no le revela qué.

Al llegar a casa, Esteban encuentra el cuerpo de Diana flotando en la alberca. Sabe que ha sido asesinada y por eso entrega a Julio las pruebas que tiene contra Raúl Santibáñez. A esto se suma Lía, quien hace saber al agente que ella fue atacada por Iván, quien intentó matarla hace tiempo y después la persiguió por el bosque, donde finalmente la atrapó y secuestró con la intención de matarla. Julio ata cabos y acude a detener a Raúl, quien tiene todo en su contra y jura que se vengará, mientras que Lía no se separa un solo momento de Esteban, al que Mónica dice que todo el odio de Raúl Santibáñez se debe a su madre. El periodista defiende a Lía y hace saber a la muchacha que su madre sería capaz de todo por ella y si enfrentó a ese criminal fue por defenderla, pues siempre ha querido protegerla.

Julio descubre que Dante mantenía relaciones con muchas mujeres de edad y que vivía de lo que obtenía de ellas. Se pregunta si pudo haber sido asesinado y presiona a Sergio para que confiese pero este asegura que no fue así e insiste en que el hombre fue víctima de sus amantes. No dice quienes y sin embargo traiciona a Omar, quien es detenido y también enjuiciado y condenado a muchos años de cárcel. Tiempo después Alejandro visita a Raúl y este le dice saber que su esposa es una mujerzuela que lo engañó, pues él contrató a Dante y le pagó muy bien para que las enamorara a ella y su hija, desatando así su venganza por lo que Mónica le hizo a su hijo. Alejandro, ofuscado y confundido, se da cuenta de que él ha sido la única víctima en la trampa de su enemigo, al que maldice y el cual le asegura saber que él fue quien mató a Dante al descubrir lo que pasaba y por ello lo enviará a prisión, para que su familia se destruya, como sucedió con la de él. Raúl toma la decisión de contarle todo a Julio pero no lo logra pues en un enfrentamiento con Omar, este lo asesina con un puñal.

Paulina se siente terriblemente sola sin Sergio y Marcelo, así como sin dinero por lo que Lía le consigue un trabajo en la oficina de Esteban, mismo que no se repone a la muerte de Diana y publica toda su investigación sobre Raúl Santibáñez, el cual debe cumplir demasiadas condenas en la cárcel, desde donde maldice a los Baena. Recibe una visita de Vanessa, quien ha contribuido a su caída y la cual le hace saber que todo el dinero que robó regresará a manos de sus dueños y con ello ella intentará compensar el daño que él hizo. Raúl la maldice y desprecia mas aún tiene un as bajo la manga.

Alejandro es perseguido por el recuerdo de la muerte de Dante y decide entregarse a la policía pero Lia le pide que no lo haga, si finalmente todos piensan que se trató de un accidente.

UN AÑO DESPUÉS. Julio ha ascendido por sus esfuerzos y aciertos y es mano derecha de Esteban en muchas investigaciones policíacas.

Lía y Alejandro asisten a una gala benéfica a la que van las amigas de la mujer y Vanessa, la organizadora, misma que apoya una fundación para enfermos de VIH. En esta gala Orlando pide a Mónica, su ahora novia,que sea su esposa y ella acepta, llenando de felicidad a sus padres.

Renata y Gerardo son un feliz matrimonio que para complementarse ha decidido adoptar un hijo y así formar una verdadera familia. Celebran esto con amigos y piden a Lía y Alejandro que sean los padrinos de este niño.

Lía ronda el edificio en que vivió Dante, llena de nostalgia. Es sorprendida por Julio, quien le pregunta si ella intimó con su enfermero. La mujer lo niega y le dice que ese hombre engañó a su hija y se pregunta por la mujer y los hijos a los que abandonó. Consigue que el policía le de los datos de esa familia, a la que hace llegar regalos y una fuerte suma de dinero como supuesta indemnización del occiso, haciendo a la esposa, Clara, muy feliz. Por otra parte la mujer basa en su experiencia la historia de un nuevo libro, el cual es un suceso que celebra con Alejandro, quien cree que el matrimonio se encuentra más unido que nunca.

Lía acude a un centro de yoga en el que ha intentado recuperar el equilibrio de su vida. Durante un día de tormenta es la última en salir pues espera a que la lluvia pase para caminar al estacionamiento. Sin embargo el lugar cierra. Espera fuera de un edificio y luego de un rato, al pasar de prisa por un charco un autobús la empapa. Aparece de la nada Darío, un apuesto hombre que la invita a subir a su departamento para secarse y tomar una taza de té. Ella se niega al recordar cómo fue que conoció a Dante y ante la insistencia del sensual desconocido, así como del recuerdo de los ardorosos momentos que vivió al lado de su viejo amante, dejándose llevar por el deseo, decide aceptar y sube con él, sin percatarse de que a lo lejos Alejandro la está vigilando.





Fin

















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